La lámpara se cayó al suelo.
El gran genio había desaparecido con la lámpara. Entonces, Aladino no tuvo más remedio que pedirle otro deseo al pequeño genio.
El deseo era que el pequeño genio se hiciera el más fuerte de todos los genios y así lo hizo.
Después le dijo que los volviera a mudar a la casa de su madre.